Santiago, cachai?
Después de unas 15 horas de vuelo, estirábamos por fin las piernas en el aeropuerto de Santiago. Nada más bajar del avión, lo primero era pasar por el control migratorio. He de decir que siempre me pongo nerviosa en el «momento frontera». Esa tensión pensando si puede haber algo por lo que no te dejen …