Hace ya algún tiempo que venimos preocupándonos y ocupándonos en cambiar nuestros hábitos de consumo. Día a día somos más conscientes de la repercusión que tienen los actos y formas de consumo del ser humano en nuestro entorno y nuestro planeta (véase por ejemplo las toneladas de plásticos vertidas a los mares y océanos, o las toneladas de residuos generadas). Y, paso a paso, vamos cambiando aquellas cosas con las que no nos sentimos a gusto.
Es cierto que los pequeños actos no cambian el mundo, pero sí pueden cambiarte a ti mismo, influir en los que están a tu alrededor y tu entorno. Es por eso que desde hace un tiempo, hemos empezado a intentar vivir nuestra vida de acuerdo a nuestra forma de pensar: algo más minimalista, con la mirada puesta en lo que compramos y dónde lo compramos, concienciados con la problemática del plástico, la generación de residuos y, ya en los últimos tiempos, con la creación de un huerto de autoconsumo. En todo este proceso, es mucho lo que hemos leído y escuchado, mucha nueva información adquirida, cantidad de re-educación y mucha autocrítica y propuestas de mejora y evolución.
En todo este proceso, y valorando las opciones de consumo que tendríamos en la ciudad que vivimos, Castellón, apareció Débora con su proyecto ERRES. Esta tienda de venta a granel, basada en la idea de Residuo Cero, se ha convertido en nuestra principal fuente de consumo en la ciudad. Hemos querido hablar con ella y preparar esta entrevista para que contara su punto de vista acerca de muchos temas que creemos que pueden ser de interés para mucha gente: sostenibilidad, Zero Waste, formas de consumo,…
Agradecemos mucho a Débora que haya querido participar en esta entrevista. Podrás encontrar su tienda en la C/ Madre Vedruna 22, esquina C/ Comanda de Fadrell, Castellón de la Plana.
También podéis contactar con ella a través de sus RRSS Instagram y Facebook.
¡Esto es lo que nos ha contado!

Filosofía Zero Waste y hábitos de consumo
¿Podrías darnos tu propia versión sobre qué es el movimiento o forma de vida Zero waste o Residuo Cero?
El movimiento Residuo Cero para mi es intentar reducir en nuestra vida la máxima cantidad de basura, residuos, contaminación y tóxicos posible, no se trata simplemente de dejar atrás los plásticos, sino de una mirada mucho más amplia (los que se centran solo en el plástico los denominan plasticarianos)
En tu caso personal, ¿en qué momento te replanteaste tus hábitos de consumo? ¿Hubo algún click, un momento o algún hecho concreto?
Sí, hubo un click en mi cerebro, hace ya unos cuantos años, un día tenía que tirar la basura y me dije ¿otra vez? y pensé que cómo era posible que una sola persona, vivía sola en ese momento, podía generar tanta basura en solo dos o tres días, pensé en la cantidad de habitantes de mi pueblo, que por cierto es un pueblo muy pequeño, pero aún así pensé ¡¡madre mía, que barbaridad!! y de ahí pasé a buscar información sobre lo que ocurre con nuestra basura una vez la hemos tirado al contenedor, porque claro, no desaparece mágicamente, se abrió ante mi un mundo totalmente desconocido. Y decidí que tenía que reducir mi basura.

¿Qué cambios has llevado a cabo en tu propia vida y qué consejos o recomendaciones darías una persona que quiere empezar a cambiar su forma de consumo y de generación de residuos?
En mi vida ha habido muchos cambios en todos los aspectos, y los sigue habiendo, todavía quedan muchas cosas que mejorar. El primer paso fue dejar de comprar, estuve meses sin comprar nada que no fuese primera necesidad, comida, productos de limpieza o higiene personal. Fue un gran descubrimiento para mí, me di cuenta que realmente se necesitan muy pocas cosas lo que hace la vida mucho más simple y fácil.
El segundo paso fue reflexionar mucho antes de comprar nada lo que me llevó a descubrir otro mundo fascinante, el de los objetos de segunda mano. Y uno de los cambios más significativos fue cocinar, que se me da muy bien aunque no me gusta nada, pero todo sea por la causa. Volver a los fogones y cocinar desde cero, dejando atrás los precocinados y ultraprocesados me ha permitido reducir una barbaridad la basura que genero. Por ejemplo, hacer mi propia salsa de tomate en vez de comprarla ya preparada o cocer yo misma las legumbres en vez de comprarlas de bote…
Mi consejo para todo aquel o aquella que quiera involucrarse en este movimiento es hacer los cambios poco a poco, a medida que se nos vayan agotando las cosas pasar a opciones más respetuosas con nosotros y con el medio ambiente, leer las etiquetas de todo, ya sea comida, ropa, electrodomésticos, preguntar mucho, dejar la vergüenza en
casa, rechazar todo aquello que no necesitemos aunque sea gratis y dejar de comprar cosas superfluas que por lo general nos dan más trabajo que alegrías. Tampoco hay que lanzarse a comprar objetos residuo cero, los objetos residuo cero son geniales y habrá cosas que necesitarás comprar, como por ejemplo una botella de acero si quieres llevar agua siempre contigo dentro de la mochila, ya que la de vidrio que tienes en casa de la horchata que compraste la semana pasada no aguantará el trote y corre peligro de romperse, pero ¿realmente necesitas una pajita? Puedes beber directamente del vaso a no ser que tengas algún problema que te lo impida, o ¿un kit de cubiertos? Puedes coger los que usas en casa y envolverlos en una servilleta de tela o en un trapito, ya tienes tu kit y no te ha costado un duro, reutilizar todo lo que ya tengamos en casa. Tampoco hay que agobiarse si no podemos comprar alguna cosa porque no la encontramos sin envoltorio, o porque en nuestra ciudad no podemos encontrarlo, o simplemente porque todavía no estamos preparados para renunciar a ello, podemos reducir en otras cosas. Y sobre todo no pensar que para lo poco que haces no merece la pena, cada cambio por pequeño que sea suma, nadie, nadie, repito nadie lo hace todo perfecto al 100% El cambio es un camino y cada uno está en un punto diferente del mismo.
Muchas veces se argumenta que este tipo de consumo supone más gasto. ¿Desde tu punto de vista es así, es más caro?
En mi opinión no lo es para nada, en tema comida por ejemplo es muchísimo más barato, por poner un ejemplo, en la tienda se puede comprar un kilo de garbanzos nacionales y ecológicos por 2.95€, nosotros hacemos conservas en casa y cuando le toca al turno de los garbanzos, de un kilo nos salen unos 6 o 7 botes de garbanzos
cocidos, ¿cuánto cuestan en el supermercado 6 o 7 botes de garbanzos ya cocidos ecológicos y nacionales? También es más barato porque dejamos de comprar muchas cosas que vienen de fuera, que no son de temporada, que vienen envueltas en mil capas de plástico, porque compramos solo lo que necesitamos y evitamos el desperdicio, dejamos de comprar mucha comida basura por todos estos motivos. Lo que sí es verdad es que debemos tener claro que todo esto nos dará un poco más de trabajo y tendremos que invertir un poco de tiempo, y esto es lo que realmente, en mi humilde opinión, echa para atrás a la gente.
Respecto a la higiene la inversión inicial es más elevada en los productos reutilizables que en los de usar y tirar, por ejemplo una maquinilla de afeitar o una copa menstrual, cuestan más dinero al principio pero a la larga salen mucho más económicos, una copa menstrual tiene una vida útil de 10 años y tiene un precio que ronda los 25.00€ (las de buena calidad) ¿Cuánto nos cuestan 10 años de tampones o compresas desechables? Y
la maquinilla de afeitar con unos cuidados básicos dura toda la vida, por casa todavía ronda una de mi abuelo. Y respecto a los jabones, pastas de dientes, etc… hay de precios muy variados y si seguimos unas pequeñas pautas también cunden mucho más que los líquidos con el valor añadido de que todos estos productos no te están dañando ni a ti ni al medio ambiente.
Y con los productos de limpieza lo mismo, son más caros si solo nos limitamos a comparar el precio y ya está, por norma general todos suelen ecológicos por lo tanto tienen un impacto muy reducido en nosotros y en el medio ambiente, algo que debemos tener muy en cuenta ya que contaminar le sale muy barato a nuestra economía pero muy caro a nuestra salud, también la mayoría de ellos suelen ser concentrados con muy buenos resultados lo que nos permite usar muy poquita cantidad por lo que de esta manera nos cunde mucho el producto y no necesitamos comprar tan a menudo como los comerciales.

El proyecto Erres Castelló
¿En qué momento y por qué te decidiste a abrir un negocio de este tipo en la ciudad de Castellón?
Llevaba tiempo valorando mis opciones laborales, debido a un pequeño problema en mi rodilla no soy capaz de hacer cualquier trabajo disponible, así que valoré la idea de emprender mi propio negocio, consciente que Castellón era un desierto en el tema del residuo cero, algún negocio había donde podías comprar legumbre a granel y algún jabón, pero poco más, pensé que era una oportunidad para mí y una necesidad para la
ciudad.

¿Qué se van a encontrar en la tienda quienes acudan a Erres?
Las personas que vengan a la tienda pueden encontrar productos de primera necesidad, tanto en alimentación (arroces, legumbres, pasta, frutos secos, aceite, azúcar, especias, harinas…) productos de limpieza para el hogar (estropajos naturales, cepillos limpieza, bayetas biodegradables, detergente lavadora, limpiador baños,
desengrasante, limpiacristales, detergente lavavajillas, etc…) y productos de higiene personal (champú sólido, jabones sólidos, pasta de dientes sólida, esponjas naturales, cepillos de dientes, compresas reutilizables, desodorantes, etc…)
También encontrarán una pequeña muestra de productos residuo cero, como botellas termos, envoltorios de comida reutilizables, bolsas de tela para comprar a granel, etc…)
Una de las ideas del proyecto es que, por lo menos en los básicos que usamos a diario en nuestros hogares, que son los productos que más basura suelen generar, podamos adquirirlos sin envase y demos opción a reutilizar todo los que ya tengamos en casa.

¿Qué tipo de ayudas y qué trabas te has encontrado a la hora de emprender este proyecto?
Respecto a las ayudas no he encontrado ninguna, pero trabas muchas, desde el papeleo oficial, al ser algo bastante novedoso aquí me hicieron dar muchísimas vueltas, no sabían que tipo de negocio era el que quería abrir, no sabían nada sobre normativa de venta a granel, fue bastante frustrante. Hasta la gente que me decía que
eso no iba a funcionar, que quien iba a comprar en un sitio así, incluso un vecino del bloque de arriba, un día cuando la tienda todavía no estaba abierta, me preguntó que qué iba a montar, después de explicarle su contestación fue “no vas a durar ni dos meses”. Así que bueno, el comienzo estuvo lleno de incertidumbre.
¿Ha sido fácil o complicado encontrar proveedores y productores con una filosofía Zero waste como la que promueve Erres?
Ha sido complicado, y lo sigue siendo, ya no tanto en los productos residuo cero, sino en la alimentación y en los productos de limpieza, sigo “peleando” para que no usen plástico en los envíos, alguno se escapa, en el envasado que usen todo papel, en esto todavía sigo con la lucha, y muchos otros pequeños detalles.
Hace algo más de un año que Erres abrió sus puertas, ¿qué balance haces de este tiempo? ¿Qué acogida y repercusión crees que ha tenido la tienda?
El balance en general es positivo, pero ha sido un año y medio muy duro, está siendo complicado mantener la persiana levantada, aún así la tienda ha tenido bastante repercusión, mucha gente se muestra interesada en el proyecto, bastantes seguidores en redes sociales y todos y todas coinciden en que la basura es un gran problema, pero todavía los ciudadanos de Castellón en general no están concienciados y no terminan de dar el paso hacia una compra más sostenible, la opinión en general es que comprar de esta manera es un rollo, acordarse de traer los envases, tener que planificar la compra, etc…

Reflexiones, evolución y futuro
¿Hasta qué punto crees que la sociedad, como individuos, tenemos responsabilidad en el problema de los residuos y hasta qué punto lo tienen las instituciones, gobiernos y legislaciones que lo permiten?
Coincido totalmente con los expertos que nos dicen que el consumidor tiene un gran poder, y claro todo gran poder conlleva una responsabilidad, creo que los consumidores debemos ser mucho más responsables a la hora de realizar nuestras compras, informarnos mucho de lo que vamos a comprar, preguntar y leer las etiquetas, si los consumidores dejamos de comprar productos envasados, como fruta, verduras, frescos, alimentos secos, etc… las empresas dejarán de tener tantos beneficios y ahí será cuando estas se replantearán cambiar el modelo, mientras el modelo les funciones a las empresas continuarán sin realizar cambios.
Respecto a los gobiernos sin ninguna duda son muy laxos con todo este tema, deberían endurecer muchísimo más leyes y no dejarse influenciar por las grandes empresas que les presionan para no sacar leyes en contra del plástico y la reducción de residuos en general.
Y las empresas tienen una gran capacidad para hacer cambios de hoy para mañana, pero simplemente no quieren hacerlo, posiblemente porque rebajen un poquito sus beneficios.
En conclusión, los consumidores somos los que podemos cambiar el rumbo con nuestras compras, mientras sigamos alimentando con nuestro dinero un modelo contaminante, nada cambiará.
A raíz de la pandemia de la COVID19 y todas las circunstancias que hemos vivido a nivel sanitario, social, económico,… ¿crees que esta situación dejará en las sociedades algún cambio en la manera de consumir? ¿Estaremos más predispuestos a apoyar el negocio local, de proximidad y sostenible?
Espero de corazón equivocarme por completo, pero todos hemos visto imágenes de los supermercados abarrotados, con unas colas infinitas, comprando sin ningún criterio todo lo que podíamos sin pensar en la persona que viene detrás, mientras que casi todos los pequeños comercios estaban totalmente vacíos. Desgraciadamente también hemos podido ver la cantidad de guantes y mascarillas tiradas en la calle. Así que no, no creo que la pandemia cambie nada.
¿Qué tipo de avances crees que se han llevado a cabo en los últimos años y qué crees que todavía queda por hacer?
En cuanto a los avances parece que la sociedad va abriendo un poquito los ojos ante esta problemática, se habla del tema un poco más en los medios de comunicación, que por cierto no han aparecido a lo largo de la entrevista y también tienen un papel muy importante que desempeñar y mostrar la realidad de los residuos.
Y queda todo por hacer, falta mucha educación y concienciación, falta mucho respeto y civismo. Faltan leyes que regulen, pero sobre todo de lo que más carecemos es de voluntad.

¡MUCHAS GRACIAS!
(*) Nota mental: indagar y preguntarnos más acerca del papel de los medios de comunicación sobre la información que se genera en torno a la problemática de los residuos
Mucha suerte y mucho ánimo con este proyecto tan necesario.
Excelente articulo muchas gracias por compartilo.
¡Gracias! Nos alegra que te haya gustado. Iniciativas como esta son muy necesarias 🙂