... ya veremos.
Porque sí, efectivamente, este viaje por Sudamérica ha terminado. Es una etapa que cerramos. Igual que nos despedimos de Madrid hace casi 8 meses, nos despedimos ahora de este gran viaje. Han sido 5 meses increíbles de historias, aprendizajes, nuevos amigos, naturaleza sin fin, y mucho más. Ha sido otra forma de vida, un periodo sin estrés y sin horario marcado y establecido. Un tiempo para nosotros, para vivir y disfrutar. Más que un viaje, ha sido una vida en viaje. Otra manera de plantearse la vida y de ver las cosas. Otras preocupaciones y otras prioridades en la cabeza. En definitiva, un tiempo en el que hemos intentado ser felices siendo nosotros mismos.
¿Y ahora qué?
Circunstancias de la vida provocaron que volviéramos antes de lo que teníamos planeado. Forma parte de la vida aceptar las cosas como vienen. Así que ahora es tiempo de replantearnos nuevos objetivos y proyectos. Buscar nuestro hueco con ilusión y ganas. Enfocarnos hacia lo que queremos y nos hace felices, ¡que no es tarea nada fácil!
Una de nuestras pasiones, claro está, es el viaje. ¿Y quién dice que no se puede viajar estando en casa? Redescubrir tus lugares, los de siempre, y mirarlos con otros ojos. Como cuando te bajas de un avión/autobús esperando sorprenderte con aquello que te vayas a encontrar. También hemos aprovechado para subirnos de nuevo a la bici y pedalear. Nos reafirmamos ¡ciclo-viajar nos encanta! (En breve contaremos la experiencia ;D).
Así que una etapa se termina, pero el cuento está lejos de acabarse. Mientras haya tiempo/oportunidad/vida/ganas, seguiremos.
Colorín colorado, este cuento…CONTINUA.
¿Cómo puede escribirse un resumen de 159 días? 5 meses que han sido 5 países, 47 alojamientos, 64 desplazamientos y cientos de momentos.
¿Qué podemos hacer para haceros llegar parte de lo que hemos sentido en este tiempo? DENTRO VÍDEO.